La Neuropsicología infantil es una disciplina científica y clínica, a caballo entre la neuropediatría y la psicología, que se dedica a la evaluación, diagnóstico y tratamiento de niños y niñas con trastornos cerebrales o déficits neurocognitivos de diferente índole.
Su objetivo principal es evaluar y compensar las consecuencias del daño o disfunción cerebral del niño mediante la rehabilitación neuropsicológica.
- Niños con retraso madurativo.
- Dificultades neuropsicológicas del aprendizaje.
- Trastornos del lenguaje.
- TDH.
- Traumatismos craneoencefálicos.
- Retraso mental.
- Parálisis cerebral infantil.
- Epilepsia.
- Trastornos psicomotores.
- Endocrinopatías.
- Cromosomopatías.
- Alteraciones del cuerpo calloso (agenesis del cuerpo calloso).
- Cuadros Epilépticos, Síndrome de West.
- Trastornos en la lateralidad.
- Niños de bajo peso al nacer.
- Trastornos generalizados del desarrollo.
- Otras poblaciones de riesgo.
- Principalmente para establecer un diagnóstico neuropsicológico que posibilite una adecuada y adaptada rehabilitación neuropsicológica del niño, así como conocer el grado de preservación o deterioro en diferentes dominios cognición, percepción, motricidad, conducta afectivo-emocional, como consecuencia del daño, disfunción o inmadurez del SN.
- Para hacer una orientación educativa adecuada, puesto que las alteraciones neuropsicológicas se traducen en problemas de aprendizaje y fracaso escolar. Un diagnóstico neuropsicológico individualizado permite conocer la madurez del niño para realizar adaptaciones y mejorar los objetivos curriculares.
- Como medida preventiva, sobre todo en aquellos niños con antecedentes de riesgo biológico que hayan presentado alteraciones prenatales o perinatales especialmente los de tipo traumático e infeccioso y en aquellos niños con antecedentes familiares de patologías disfuncionales.
- Para realizar un control evolutivo, que permita conocer cual es la evolución del niño cuando esta recibiendo algún tipo de tratamiento tanto a nivel neuropsicológico como farmacológico.
Son todas aquellas medidas neurocognitivas que permiten estimular las funciones cognitivas que no ha sido adquiridas por el niño, o recuperarlas en el caso de que hayan sido parcial o completamente abolidas tras una lesión cerebral.
La rehabilitación del daño o la disfunción cerebral en la infancia pone en marcha procesos de plasticidad neuronal, que entiende el cerebro como un sistema en constante desarrollo que puede llegar a presentar unas capacidades de adaptación espectaculares. Es decir, un niño con un trastorno en el SNC puede conseguir modificar zonas cerebrales y llegar a adquirir habilidades que le creían inalcanzables. Por ello, cuanto menor sea la edad del niño, mayores posibilidades de recuperar una función afectada o abolida como consecuencia de daño cerebral.
Una metodología neuropsicológica que utiliza la plasticidad cerebral infantil con el objetivo de activar al máximo sus capacidades, teniendo en cuenta la precocidad en el tratamiento y con excelentes resultados es la Atención Temprana (AT).